Esta semana hablaremos sobre una noticia de actualidad: el mercado de Argüelles cambia de imagen tras más de 60 años de servicio. En unas semanas concluirán las obras de remodelación de este espacio, en el que se han invertido 3,9 millones de euros. El mercado de Argüelles es un edificio proyectado en 1942.

El Mercado del barrio de Argüelles siempre estuvo en la calle de Altamirano, aunque antes de la Guerra Civil las actividades comerciales se realizaban en plena calle, y sólo un existía un modesto cobertizo para guardar género y cajas. Pablo Neruda, que vivía en la Casa de las Flores, en su poema "Explico algunas cosas" (1936) ya aludía a aquel primer mercado al aire libre:
"Todo
eran grandes voces, sal de mercaderías
aglomeraciones de pan palpitante,
mercados de mi barrio de Arguelles con su estatua
como un tintero pálido entre las merluzas:
el aceite llegaba a las cucharas,
un profundo latido
de pies y manos llenaba las calles, metros, litros, esencia
aguda de la vida, pescados hacinados,
contextura de techos con sol frío en el cual
la flecha se fatiga,
delirante marfil fino de las patatas,
tomates repetidos hasta el mar".
Fue al terminar la guerra cuando comenzó la construcción del edificio del actual Mercado de Argüelles. Proyectado por el arquitecto José Aspiroz, se construyó entre los años 1945 y 1947. El chaflán de la esquina, un mirador acristalado, es muy característico de la arquitectura madrileña.

El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ha visitado recientemente el mercado. En su rehabilitación se han invertido cerca de 3,9 millones de euros para devolverle su "singularidad estética" -1,2 millones de euros en subvenciones municipales, aportaciones de los propios comerciantes y 400.000 euros de la Comunidad de Madrid-. La planta baja está prácticamente terminada, no así el sótano, donde abrirá sus puertas un Ahorramás, al que le faltan unas semanas. Del total de 3.262 metros cuadrados, 1.100 corresponden a los puestos tradicionales, 940 al Ahorramás y 369 a la academia. El resto está ocupado por cámaras frigoríficas y aseos.

Gallardón ha explicado que desde que llegó al Consistorio ha apostado por el comercio minorista y de proximidad -ha destinado desde 2003 más de de 128 millones de euros a proyectos vinculados con el pequeño comercio- pero desde otro prisma, no desde el proteccionismo sino desde el incentivo. Su idea es lograr que los clientes quieran ir al pequeño comercio porque les ofrece incentivos como la calidad de sus productos y servicios. Desde este ángulo, los mercados tradicionales y de barrio no son espacios protegidos sino competitivos.